Si te decides por instalar una puerta acorazada en tu hogar y asegúrate de que dure muchos años más, el mantenimiento resulta de gran importancia para conservar su estética y sus funciones sean las mejores.

Es por ello que en este artículo te enseñaremos todo lo necesario para el mantenimiento de seguridad, como limpiarla e incluso darle brillo para que mantenga una buena apariencia por más tiempo.

Mantenimiento a una puerta de seguridad

Par que una puerta acorazada tenga una vida útil por más tiempo y siga ejerciendo su función de protección el mantenimiento es importante, por lo que es recomendable aplicar los siguientes consejos:

Lubricar las bisagras: las bisagras de las puertas son muy importantes y estas pueden ser propensas a sufrir algún desgaste, para evitar este tipo de problemas al momento de la apertura y el cierre, es esencial lubricarlas con frecuencia, es posible utilizar un aceite de silicona o aceite para máquinas ligeras, asegurándose de aplicar la cantidad adecuada y limpiando los restos de aceite que puedan quedar en la puerta.

Limpiar la superficie: las puertas acorazadas están fabricadas para resistir a los diferentes cambios climáticos y a los golpes, por lo que es importante que la superficies estén limpias y estén libres de mancha y suciedad, por ello es recomendable utilizar jabón neutro y agua, evitando que se puedan utilizar productos abrasivos y que puedan dañar el recubrimiento de la puerta.

Revisar el sistema de cierre: el sistema de cierre es una de las partes más importantes de una puerta acorazada, ya que garantiza su efectividad como medida de protección, es necesario revisarlo periódicamente para asegurarse de que sus función sea óptima  y si hay algún problema es importante llamar a un cerrajero para que repare este elemento de la puerta.

¿Cómo darle brillo a una puerta de seguridad?

Si deseas mantener una puerta de seguridad en las mejores condiciones, es importante ofrecerle brillo de una forma regular, es por eso que aquí te damos algunos consejos para que lo logres oportunamente:

Limpiar la superficie: antes de aplicar cualquier producto para el mantenimiento de la puerta es importante retirar todo el polvo y la suciedad acumulada.

Aplicar un limpiador de metales: puedes utilizar un limpiador de metales específicos para puertas de seguridad, aplicándolo con un paño suave y limpio, frotando suavemente la superficie, no es recomendable aplicar este tipo de productos en las cerraduras o sistemas de cierre.

Proteger la puerta: en el momento que se haya limpiado y pulido la puerta, es recomendable aplicar una capa de cera o un protector de metales para mantenerla brillante y protegida del desgaste y la corrosión.

Mantener una puerta acorazada en las mejores condiciones es esencial para garantizar la seguridad de la propiedad, inicialmente es recomendable reconocer el tipo de puerta y luego aplicar el mantenimiento adecuado.

De igual forma hay que tener especial cuidado con las cerraduras y los sistemas de cierre, es recomendable hacer un mantenimiento regular de los mismos y así prolongar la vida útil de tu puerta de seguridad.